Un hotel fantástico..
El hotel es completamente nuevo, las habitaciones son espaciosas y muy agradables, decoradas con mucho gusto, los dueños del hotel son majísimos y te hacen sentir como en casa. Todo está cuidado al detalle, y se nota el cariño que hay puesto en cada rincón. Ofrece facilidades de todo tipo para la gente que va a esquiar, para dejar los esquís, para conseguir los forfeits... además se encuentra a dos minutos del centro del pueblo. Nosotros estuvimos en una habitación que tenía vistas a la montaña y era una maravilla levantarse viendo la nieve sobre el valle. Un hotel al que seguro que volvemos!!